El origen de “Clics modernos”, el disco de Charly García

Casi 35 años más tarde y con muchos hits en el camino, una necrológica publicada en un diario estadounidense se convierte en la clave para terminar de armar uno de los rompecabezas que más se esperaba entre los amantes del rock argentino: La historia de Clics modernos, también conocido como Clix modernos. 

Resulta que el arte de la tapa de Clics modernos de Charly García no es nada casual. Sin embargo, la historia no estaba del todo resuelta aún. 

Para la portada de su segundo disco como solista, Charly García había decidido viajar con el fotógrafo Uberto Sagramosos hacia Nueva York como destino final. Su plan original era escribir, por su propia cuenta, la leyenda “Nuevos trapos” en una de las grafiteadas paredes de la ciudad de Manhattan. 

Antes de poder cumplir con su propósito, Charly García fue sorprendido por una pared ya escrita que sería la nueva portada de su próximo álbum estrella. Fue la combinación de una silueta negra pintada en la pared acompañada por la frase “Modern clix” la que lo llevó a tomar otro rumbo para, incluso, llegar a cambiar el nombre de su álbum. 

“Al disco yo lo iba a llamar Nuevos trapos, pero en una calle había un figura como la que pintaban acá por los desaparecidos, pero en negro, y decia modern clix. Me pareció un buen nombre.”  Dice Charly para una entrevista en Infobae.

Según el artista que tantos argentinos aman, “Modern clix” era el nombre de una grupo musical de Nueva York, pero, con sus palabras, al ver eso en la pared, “La nave despegó”. 

¿Qué hay de nuevo con Clics modernos?

A finales del 2017, solo por la curiosidad de leer la sección de obituarios del The New York Times, el periodista argentino Martín Pérez descubrió un detalle que aportaba a la trama y profundidad de este disco. 

Un grafitero de Canadá llamado Richard Hambleton, acababa de fallecer y su larga trayectoria incluía pinturas en las calles de Nueva York hechas durante toda la primera mitad de los años ‘80.  Su arte consiste en grandes siluetas de tamaño humano y color negro diseminadas por toda la ciduad de Manhattan. Las cabezas de estas figuras parecían estallar y fueron popularmente conocidas como Shadowman u hombre sombra en español. 

El curioso periodista se contactó con Kristine Woodward, una galerista de Manhattan que estuvo involucrada en el trabajo de Hambleton. Para disipar la duda, Pérez le envió la portada de Clics modernos y la galerista respondió: “Absolutamente, es una figura de Shadowman realizada entre 1981 y 1982.”

¿Qué inspiró a Hambleton a pintar lo que sería la portada de Clics modernos?

Hambleton falleció a los 65 años sin tener ni una mínima idea de que una de sus obras aparece en la portada de uno de los discos más importantes del rock latinoamerciano.

“Pinté la ciudad de negro” fue lo que dijo el artísta cuando se lo entrevistó para la revista People en 1984. “Podrían representar el peligro de las sombras de un cuerpo humano despues de un holocausto nuclear, o incluso mi propia sombra”. 

La evolución de Shadowman con sombrero de cowboy fue lo que desplazó al artista desde las calles hasta el mundo de las lujosas galerías. Haciendo frente a sus adicciones, Hambleton no perdió el tiempo y logró pintar paredes de Venecia e, incluso, el Muro de Berlín. 

“Lo mejor de los ‘80s en Nueva York es la vida de noche. En el verano de 1980 era imposible perderse de las sombras de Richard Hambleton. Estaban donde menos te lo esperabas”, cuentan en Shadowman, un documental dirigido por Oren Jacoby. 

¿Cómo puede ser que en un mundo tan globalizado se hayan tardado 35 años en completar la historia? 

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